los jardines colgantes de Babilonia

Hace poco hablamos del enorme espacio desaprovechado que suponen las azoteas de los edificios. Como lo prometido es deuda, volvemos para seguir hablando del tema. Esta vez para mostraros algunos ejemplos de una de las múltiples formas de disfrutar de estos espacios: vegetación en las azoteas.



fuente: livingroofs.org


El primer ejemplo viene de Lyon. Hace quince años el arquitecto Jacques Vouilloux creó una "casa verde" que cuenta con un techo con cubierta vegetal. Además la casa tiene un patio interior que crea una atmósfera diferente en medio de la ciudad. Tras unos años de fallos y rectificaciones la casa responde al objetivo inicial de crear un pulmón verde en medio de edificios. La conclusión de la experiencia: hay que prever mejor el crecimiento y el mantenimiento de las plantas.


fuente: greenvert.fr © Christine Lacaze


En Toronto, Canadá, encontramos otro ejemplo un poco más lujoso: un huerto en el hotel Royal York Fairmont. En este caso el hotel decidió aprovechar el espacio que tienen sobre su edificio para cultivar lo que más tarde ofrecerán en su cocina. Además todo lo cultivado respeta al máximo el medio ambiente siguiendo las normas de la agricultura biológica. Para rematar la faena una colmena aporta la fauna en este mini-ecosistema (otra forma de sacarle partido a los techos de las ciudades de la que ya hablamos en Las centinelas del medio ambiente).


fuente: Goode Green


Y terminamos con ejemplos un poco más al sur, en Estados Unidos. Hemos encontrado en este blog algunos ejemplos de lo que se puede encontrar en ciudades como Chicago o Nueva York: jardines para disfrutar de una vista privilegiada. Pero nada comparado con el huerto de Eagle Street, del grupo roof top farms, creado por Goode Green, una empresa dedicada a introducir la vegetación en los techos de Nueva York. Se trata de un proyecto creado por Broadway Stages que pretende fomentar la implantación de huertos urbanos. En el huerto (que por supuesto tiene una colmena, como no podía ser menos) se realizan cursos de agricultura para adultos y para niños de las escuelas del barrio, además de abastecer el mercado local con los frutos que da el trabajo de los voluntarios. Así que no sólo se reutiliza un espacio sin uso y se crea un espacio verde en la ciudad, sino que también se fomentan el comercio local y las relaciones entre vecinos.


antes y después


fuente: Goode Green



fuente: rooftopfarms.org


Una de las características de las azoteas es que suelen ser espacios comunitarios. Esto dificulta la tarea de la transformación en espacios verdes, sobretodo cuando se trata de terrazas inutilizadas ("mejor dejarlas como están" piensan muchos). Primero hay que convencer al resto de la comunidad y luego organizarse con todas las personas interesadas, tareas que no siempre son fáciles. Pero justamente aquí reside uno de los mayores beneficios de este tipo de aplicaciones, en el tejido social creado o mejorado.

En definitiva estas actuaciones tienen más ventajas que la simple utilización de un lugar desaprovechado. Actúan como aislantes térmicos de los edificios que cubren y regulan las temperaturas de las ciudades al aumentar las zonas verdes, ideal para ciudades de temperaturas elevadas como las de España (y gracias a la arquitectura de los '70 tenemos azoteas para aburrir).


Dentro de poco vendremos con más actuaciones en azoteas...